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Conocida por su encantador paisaje rodeado de montañas y su rica historia cultural, Salzburgo es una ciudad austriaca que no puede faltar en tu lista de destinos a visitar. Vamos a dar un paseo en coche por las maravillas de Salzburgo.
Las reglas de tráfico en Austria son un poco diferentes a las de Argentina. En Austria, se conduce por el lado derecho de la carretera. Además, el límite de velocidad en las zonas urbanas es de 50 km/h, mientras que en las carreteras es de 100 km/h, y en las autopistas llega hasta 130 km/h.
La mayoría de las zonas del centro de la ciudad de Salzburgo son de pago durante el horario laboral. Puedes comprar tickets de estacionamiento en las maquinas disponibles en las calles o en las tiendas tabaquerías. Asegúrate de colocar el ticket en un lugar visible dentro de tu coche.
Dependiendo de tus necesidades, puedes elegir entre una variedad de opciones de alquiler de coches en Salzburgo. Los coches pequeños son ideales para viajar por el centro de la ciudad, mientras que los vehículos más grandes son perfectos si planeas realizar excursiones a las montañas.
El corazón de Salzburgo es su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí encontrarás impresionantes obras arquitectónicas como la Fortaleza de Hohensalzburg, la Catedral de Salzburgo y la Casa de Mozart.
Si decides aventurarte más allá de la ciudad, puedes visitar el impresionante Palacio de Hellbrunn con sus famosos juegos de agua, o la mina de sal de Hallein, una popular atracción turística.
Salzburgo tiene un clima temperado, con temperaturas más frías durante los meses de invierno. Durante el verano, las temperaturas pueden superar los 25°C, perfectas para disfrutar de un recorrido panorámico.
No olvides probar el famoso chocolate Mozartkugel y visitar la fábrica de cerveza más antigua de Austria, Stiegl Brauwelt. Recuerda también cambiar tu dinero por euros, ya que en Austria no se aceptan otras monedas.